Gracias

Cuando decidí abrir este blog el 25 de Agosto del 2014, mi objetivo era haceros saber que cada uno lleva en su interior una libreta donde vamos anotando sentimientos que, a veces, por las circunstancias u otros motivos, guardamos dentro. Acabé mi introducción diciendo que todo ese cúmulo de sucesos pasaron a ser en mi vida puras anécdotas, y así me abrí a vosotros y vosotras.
Hoy, esas anécdotas han pasado a ser pequeños retales de mi vida que, poco a poco, he ido escribiendo y casi, sin darme cuenta, he ido sujetando con alfileres hasta ir formando una colcha, que coseré cuando llegue el momento, o tal vez, la deje así... no sé.
Lo que sí os puedo asegurar que con vuestras visitas, vuestros comentarios, vuestros me gusta... me habéis hecho sentir lo que yo pretendía con mis palabras, cuando debiera ser todo lo contrario.
Y así mi blog pasó a ser una puerta abierta, donde habéis entrado para enseñarme..."enseñar a encontrarme".
Os agradezco tanto...
Mis palabras no serían nada sin ustedes.
Humildemente... gracias.


Despierta o duerme

Despierta o duerme,
pero no te mantengas
en la ausencia
de un adiós muerto.

No te cubras de tierra
si aún tus párpados
quieren desprenderse
de un mar atormentado.

Dolorosa máscara
pesa sobre ti,
pero me tienes a mí,
servidora de tus sonrisas
arañando la tristeza
de tu cielo.

Acomodándome
a tu destino.

Intentando enterrar
esa pesada oscuridad.
Abriendo,
con llaves de amor,
esas puertas
que te dejan de frente
ante la verdad.

No estás solo
porque haré subir la luna
si eso quisieras,
Porque quitaría
la lluvia de tu corazón.
Porque te extendería primaveras...

Tranquila transparencia
te ofrezco,
en estas horas amargas
donde crees que todo
es permanente.

¡Mírame!

He puesto
alas a tus penas,
pero... despierta o duerme.


Foto extraída de Google

Regreso

Regreso
con la llamada de la lluvia,
esa que entierra primaveras,
la que con su traje gris
se apodera del cielo
y enfría el alma.

Regreso
por sus caminos de agua
sin llanto,
pero con el amargo sentir
de las calles
que parecen dormir desnudas,
ante la quietud de la muerte.

Regreso
incitando a mi corazón a latir
y me deslizo creyéndome rocío,
aceptando ausencias,
moviéndome en su soledades...

Regreso
para quedarme
con la lluvia quebrada,
con sus mañanas a oscuras,
con la flor deshojada
sin el sol encendido...

Regreso
cruzando sombras.
Llorando inviernos, temblando...
con golpes de furia
atravesando mi espalda.

Regreso,
pero con alas abiertas a la vida.


Foto extraída de Google

Al pensarte

En esta noche azul
son mis recuerdos
de ti... un instante.

En esta noche
de ausencia,
tu alma me habla
con la mirada
al pensarte.

Y al hablarme,
sé que tus labios
me dieron besos
sin besarme.

A yedra
sabe tu roce...
a yedra me sabe
sin rozarme.

En esta noche azul
mi alma te llora
al pensarte.

Y aunque
de vacíos
llenaste mi amor,
de ti son mis recuerdos,
de ti son...
un instante.


Foto extraída de Google




Descansa mi ángel

Descansa mi ángel,
cuando caiga
del cielo la noche,
en el vaivén
de mi regazo.

En el olor
de los jazmines.
En la espuma
de las olas.
En el abrir
de unos labios.

En la voz
que ordena silencio
para que cierren
tus heridas abiertas.

En las flores
del otoño.
En el andar
de mis pasos.

En el origen
de mis versos.
En la mano
que lo forma.

En la insigne
curva de tu vida
donde, ahora,
descansar,
es estar vivo.

Descansa mi ángel
para que
al despertar,
se lleve tu pasado
los frágiles dedos del dolor.


Foto extraída de Google

Yo... que vivo en ti

Voy haciendo de esas noches
en las que tú pareces distante,
una estrella que duerme a mi vida
o una rosa que muere al secarse.

Yo... que vivo en ti
y desde ti te he amado y te amo,
en esas noches,
siento marchar tu amor
para perderse en otros brazos.

Hoy la angustia,
que a mi alma ahoga,
en mí se hace voz
y desviste tu mirada ausente,
haciendo temblar el mar en tus ojos.
Despertando en ti tempestades,
remolinos de furia en mi mente.

El aire se respira triste,
y mi voz se hace lenta.
La noche nos observa
con mirada profunda.
Y tú... tú te haces silencio,
te vas yendo con ella.

Yo... que vivo en ti
y desde ti te he amado y te amo,
en esas noches
en las que tú pareces distante: muero.


Foto extraída de Google


Yo te veo

Para Claudio, con todo mi cariño.


Yo te veo
sobre la hierba
como dulces pinceladas
de melodías.

Yo te veo
en esos pétalos
que caen del alma,
pausado
en tu sonoro silencio.

Yo te veo
que aun quebradas
tus alas,
desprendes tu vuelo
del firmamento
y pasas
por la nada
siendo arboleda.

Yo te veo
entre el aire
y las hojas,
entre torres
de humo.

Yo te veo
entre el palpitar
del fuego,
y la luz
de la nieve.

Yo te veo,
en los frágiles dedos del amor.


Foto extraída de Google

Oda a la desdicha

Dedico a la desdicha
varios pensamientos:
Amargas palabras escribo
sobre amargo papel.
Si mi corazón no hubiera
renovado esperanzas,
hoy no estaría llorando.
No puedo hablar mal
de los recuerdos dejados,
pero hoy son merecedores
de profunda tristeza.
Quiero levantar un árbol
sobre esta soledad
de lágrimas oscuras,
pero me ciega la neblina
de la desesperanza
y la tierra
se vuelve cemento.
Estos ojos míos
no quieren sentir
el salobre del mar,
pero ahí está el alma
para recordar,
que la amargura los visita,
armada con cuchillos,
atacando una y otra vez.
Hoy es el día
donde murió la esencia
de los te quiero.
Donde capítulos
que yo no escribí,
fueron escritos
por el sufrimiento
de unas despedidas
no entendidas.
Hoy sí... Mañana no...
Mientras el dolor golpea
y todo el peso de la soledad
cae sobre mi pecho
como una loza.
Y yo quiero perderme...
pero las lágrimas
corren, veloces,
tras mis pasos,
y los atrapa...
Y siento el frío,
que huele a muerte,
llenar los vacíos
que en mí dejaste.
Desdicha,
hoy soy para ti:
"Tierra a la tierra..."


Foto extraída de Google